A través de un comunicado de prensa, el Partido Solidario de la provincia de Neuquén expresó su “solidaridad con la compañera docente Giselle Kler, quien fuera víctima de abuso de autoridad y malos tratos por parte del personal policial provincial en un irregular operativo de control sanitario en el marco de la pandemia de la cual todos somos víctimas”.
“Exigimos que le sean retirados los cargos que se le pretenden imputar”, explicitaron en el documento difundido este domingo 12 de abril.
Medios locales describen que el sábado 11 poco antes del mediodía Giselle Kler “volvía a su casa luego de retirar dinero y hacer algunas compras en el negocio más próximo cuando se topó con un control de la policía de Neuquén”. “Le pidieron un permiso para circular que no es necesario en esos casos, y pese a que trató de hacerse entender por los uniformados -todos varones-, le quitaron por la fuerza las llaves del auto”. “Luego una oficial mujer la esposó y la tiró boca abajo en la caja de una camioneta, sin posibilidades de ponerse un barbijo”, dice la crónica que publica hoy el diario Río Negro, que además agrega que “Gisella es docente en la escuela 280 y tiene un hijo de 4 años” y que “hasta hoy no sabe dónde está su auto ni la mercadería que compró el sábado a la mañana y que le fue secuestrada sin orden judicial, por la policía”.